18 febrero 2012
Varias paradas, nos separan de Camboya a Laos, la primera después de 3 horas, y todavía en Camboya, aprovechamos para comer. Un mini-bus nos lleva hasta la frontera, pagando 35$ de visa y 2$ por el sello de salida del país, y otros 2$ por el sello de entrada al nuevo país, como siempre somos los más engañados, mientras miembros de otros países pagan 30$, a nosotros como nos sobra el dinero nos hacen pagar 5$ más…después de todo esto ya estamos en Laos.
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| Llegada a Laos |
Nuestro primer destino son lo conocido como las 4000 islas, elegimos Don Det, 4 días de relax absoluto, un lugar inmejorable para esto…hacer nada. Baños en el Mekong,
recorrer en bici hasta Don Khon, la isla de al lado, a la que se puede acceder tras cruzar un puente en el que debes pagar 20000 kips
y por último maravillarnos con las fantásticas puestas de sol sobre el río.
recorrer en bici hasta Don Khon, la isla de al lado, a la que se puede acceder tras cruzar un puente en el que debes pagar 20000 kips
y por último maravillarnos con las fantásticas puestas de sol sobre el río.
Pakse, es el lugar elegido para empezar nuestra ruta en moto, alrededor de Bolaven Plateau. Junto con Lorenzo, un francés que se une al grupo, visitamos las Phaxuam Waterfalls.
Llegando a Tat Lo, encontramos un lugar, en el que guiados por un grupo de niñ@s de la aldea, nos bañamos y nos divertimos incluso más que ellos.
Llegando a Tat Lo, encontramos un lugar, en el que guiados por un grupo de niñ@s de la aldea, nos bañamos y nos divertimos incluso más que ellos.
El itinerario del segundo día, nos lleva hasta Paksong, pinchazo incluido en el camino.
De aquí conducimos 12 kilómetros hasta las cascadas de Ted Yuang…simplemente espectacular.
Tad Fane, son las más grandes de Laos, 150 metros de caída, pero las evitamos, al oír que no nos podemos bañar en ellas. El calor solo nos hace pensar, en meternos al agua para sofocarlo, así que ponemos rumbo a Tad Champee.
De aquí conducimos 12 kilómetros hasta las cascadas de Ted Yuang…simplemente espectacular.
Tad Fane, son las más grandes de Laos, 150 metros de caída, pero las evitamos, al oír que no nos podemos bañar en ellas. El calor solo nos hace pensar, en meternos al agua para sofocarlo, así que ponemos rumbo a Tad Champee.
Tras hacer noche en Paksong, montamos en nuestras motos en busca de las ruinas de Champasak.
En un par de horas, llegamos a un punto en el cual tenemos que cruzar el Mekong en bote junto con nuestras motos.
Las ruinas que pretendíamos ver, nos parecen excesivamente caras, damos media vuelta y volvemos a Pakse, por probablemente, la mejor carretera de todo Laos.
Cinco meses después de abandonar la India, volvemos a ella en Pakse, por un periodo de hora y media, lo que tardamos en cenar en un restaurante indiano, en compañía de Lorenzo, Marine y John, otra pareja de franceses.
En un par de horas, llegamos a un punto en el cual tenemos que cruzar el Mekong en bote junto con nuestras motos.
Las ruinas que pretendíamos ver, nos parecen excesivamente caras, damos media vuelta y volvemos a Pakse, por probablemente, la mejor carretera de todo Laos.
Cinco meses después de abandonar la India, volvemos a ella en Pakse, por un periodo de hora y media, lo que tardamos en cenar en un restaurante indiano, en compañía de Lorenzo, Marine y John, otra pareja de franceses.
Cuando coges un autobús en Asia, sabes que no va a ser un viaje fácil ni cómodo, pero cuando te dicen que tarda 6 horas y de repente son 12 porque hemos parado mil veces sin motivo alguno, se te crispan los nervios y el cabreo no tiene límite. Ésto nos pasó yendo de Pakse a Thakhek, 350 kilómetros entre una ciudad y la otra.
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| El autobus de la muerte |
Una vez aquí, tenemos la suerte de conocer a Alice de Francia, pero con residencia en Austria (Viena), Silvia de Ciudad Real, pero viviendo en Escocia (Edimburgo) y Andreu de Menorca.
Juntos los 6 alquilamos 3 motos y nos disponemos a hacer el recorrido conocido como Loop, por los alrededores de Thakhek.
Visitamos Bouddha cave,
Phamh cave, donde disfrutamos de un baño dentro de la cueva,
para terminar el día en Thalang, en la guest house de Phosy, un amable laosiano, que nos entretuvo con la petanca y sus happy things.
Phamh cave, donde disfrutamos de un baño dentro de la cueva,
para terminar el día en Thalang, en la guest house de Phosy, un amable laosiano, que nos entretuvo con la petanca y sus happy things.
El 2º día fue todo un reto el conducir las motos por caminos de barro,
mientras que el tercero, aprovechamos para bañarnos en las cool spring
y sorprendernos con una cueva de más de 7 kilómetros, Konglor cave.
mientras que el tercero, aprovechamos para bañarnos en las cool spring
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| Jumping llegando a las cool spring |
y sorprendernos con una cueva de más de 7 kilómetros, Konglor cave.
De camino en nuestro cuarto día, nos colamos en las Namsanam waterfall,
contemplamos el Limestone forest, desde un mirador,
continuamos nuestro camino y necesitamos algo de tiempo para arreglar un par de pinchazos.
Último día de la moto, un nuevo pinchazo es lo más reseñable del día,
contemplamos el Limestone forest, desde un mirador,
continuamos nuestro camino y necesitamos algo de tiempo para arreglar un par de pinchazos.
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| Andreu, batió el record de pinchazos en un día |
Último día de la moto, un nuevo pinchazo es lo más reseñable del día,
volvemos a Thakhek, donde nos despedimos de Alice, Silvia y Andreu, nuestro equipo de EASY RIDERS. Thank you everyone for this wonderful days.
“…porque esta vida son dos días y hay que ir lento, disfrutando cada día, cada momento…y que llamen a mi puerta, para que sepan que es verdad, que esta vida te devuelve lo que tú le das…”
--El Puchero del Hortelano--
